lunes, 30 de junio de 2008


8 comentarios:

Anónimo dijo...

Aprecio la ausencia de romanticismo de tu arte. Entiendo por romanticismo la belleza que proviene de la evocación de un ideal. Sin embargo me gusta más pensar que es la belleza que proviene de la evocación. Lo cual lleva al arte al límite de la expresión, es decir un arte que no evoque nada, que cuestione su propia existencia.

Anónimo dijo...

Lo más interesante del arte es que plantea un conflicto en el lenguaje cotidiano, el lenguaje entendido. Es decir, evoca algo. Pero algo que sólo puede ser entendido a través de él mismo, por lo tanto no es una evocación. Su cuerpo es su signo. No puede pertenecer a ningún sistema.

Anónimo dijo...

La existencia misma no puede pertenecer a ningún sistema.
Nosotros nos podemos asumir como entes pertenecientes a un sistema pero el hecho real de nuestra existencia no lo es, es algo presente, que se presenta. No puede adquirir ningún lenguaje, su cuerpo es su signo. Por lo tanto no podemos asumirnos a traves del lenguaje. Mientras lo intentemos lo único que generamos es capas de confución, por mas sofisticado que este lenguaje sea.

Anónimo dijo...

Esa ausencia de significado es lo que debe existir en cada momento.
Esa cosa que no puede ser entendida.Tratar de darle un significado es lo que yo llamo, ser un careta. Tratar de conceptualizar la propia existencia, por dios, a que estamos jugando?

Anónimo dijo...

Sarta de cagadas salen de tu boca

Anónimo dijo...

Me pregunto que saldrá del vientre de tu hermana dentro de nueve meses.

Anónimo dijo...

mmm, hay que ver como nos comportamos cuando estamos totalmente sólos y no tenemos nada que hacer, un domingo como éste por ejemplo. HOy lo unico que expresé oralmente fueron unas estrofas de una cancion de Favio mientras me bañaba y fue ese uno de los pocos monetos del dia que hilé un pensamiento: "¿por qué habrá dejado de cantar?" y un intento de respuesta: "porque no se sentía muy groso"

Un aire de condesa te quieres dar y lo único que logras es hacerte odiar
no se si llegue el día
que tu quieras despertar.

...una mina careta.

Anónimo dijo...

Maravillosa estrofa. Qué difícil cuando nos enamoramos de alguien que no quiere despertar.
Me pregunto si en realidad todos no estamos soñando.